Estela se llama la cardigan que cosí ya hace un año.
Este año me he vuelto a coser otra pero en un tejido mucho más ligero, con una caida distinta y el efecto nada tiene que ver con la anterior, pero me sigue gustando el patrón que saqué, así que la uso y me gusta.
Los lunes siempre quedamos unas amigas y sus hijos e hijas en los jardines de Aranjuez, concretamente en el jardín del Príncipe. Allí nos lo pasamos
genial.
Nosotras cacareamos,
nos desahogamos,
nos animamos,
nos actualizamos,
picamos algo de comer,
nos ayudamos,
nos apoyamos.
Los niños y niñas
meriendan,
trepan,
persiguen a las patas,
a los patitos,
los mosquean…
Se separan más y más de nosotras, les perdemos de vista; yo padezco porque Aran es la más pequeña y de vez en cuando la oigo gritar. No es la única que grita. Gritan de felicidad, porque se pelean, porque están vivos y vivas.
“Pero a ver, hay que tener sexo más a menudo, debería ser casi una cuestión de deberes, de cada tanto se debe hacer y santas pascuas”.
“Es que es verdad, con lo bien que sienta pero es que a las 10 de la noche ya estoy reventada”.
Aran, pero por favor, entiendes que a A. no le apetece nada que le continues pegando, jolines hija.
“Yo es que ahora me comería un buen bollo de chocolate, pero es que en casa no tenemos de eso, y tampoco se lo doy a los niños/as asiduamente”.
“No entiendo como esa tía me pide que le cambie el día si sabe en la situación familiar en la que estoy, siempre vienen a la más débil”.
F., yo creo que eso de llevar a Lluna a todo trapo en un triciclo tan pequeño dando vueltas sin parar puede acabar mal. ¿Por qué no frenas un poco anda, F.?
“Esto de no poder hablar del procés català tranquilamente se arregla saliendo nosotras a tomar unas cerves y ya está”.
“Yo lo que necesito es desmelenarme de verdad y volver a sentirme como una chavala, como si tuviera 18 años, como cuando viajaba por ahí sin tener que darle explicaciones a nadie”.
¿Vosotras les habéis dado de merendar a vuestros hijos en casa? Pues vaya tela, ¡menudos alimañas! Igual comen mandarinas, que tortitas, que piedras, jajajaja.
“Es que ahora resulta que se ha separado otra prima mía, yo flipo, yo no sé lo que pasa hoy en día pero es que estamos hechas de otra madera”.
“Yo no sé cómo comen tanto estos niños, yo es que ya les tengo que prohibir que coman más macho”.
“Pues que su profe se ha vuelto a dar de baja, y nada, de momento con quien toque, a todas horas cambiando”.
Yo continuo sin entender la sinergia de algunos niños varones, y eso que soy consciente de que no se puede generalizar, eh!! Lo que pasa es que como tengo 3 hijas, en el fondo por más que intento comprenderlo no sé porqué existen muchos niños que se relacionan así, tan cuerpo con cuerpo, y con esa energía tan bruta… Aunque yo tengo alguna que también tiene energía a tope, jajajaja. Ays chicas, menos mal que solo me pasa durante la ovulación, pero a menudo pienso que sería feliz teniendo otra criatura, ese cuarto hijo que llenaría mi casa de alegría.
No hay nada mejor que vivir en tribu.
Me he aficionado a los imperdibles de falda como lo llaman por aquí. Ahora bien, este es más grueso de lo habitual y me ha agujereado el jersey que llevaba debajo, ¡mierda!
El bolsillo va continuado, es decir, el delantero de la chaqueta está formado por una parte superior que lleva un forro del bolsillo en la misma pieza, y la parte inferior lleva un forro de bolsillo incorporado en la misma pieza.
Y a ti, ¿te gusta cacarear con tus amigas y compartir la crianza con ellas?
¿Hechas de menos más chicos en tu entorno de crianza?
Voy a pasarme por la nueva iniciativa de las Malas Costureras, conocida como MIMI, mi miércoles. Contenta de continuar viéndoos por aquí.
Enlaces: MIMI, el club de las malas costureras
Patrón: Patrón propio inspirado en Minna de Jafi
Tela: Ribas y Casals en rebajas, ¡oh yeah!
Mireia
Patxoca
unamicamesijaesta
Helena
unamicamesijaesta
CLUB MALAS COSTURERAS
unamicamesijaesta
Anahi
Sewing with Mei
Mi Pura Vida
Sara Paraxuta
Alicikita coseprimacose
unamicamesijaesta